En primer lugar quiero daros las gracias a todos los que estáis aquí, a las invitadas e invitados que no han dudado en dedicar su tiempo para compartir este acto con nosotras, y en particular a las socias del Círculo de Mujeres de negocios que participan en este evento.
Todas las que estáis aquí habéis demostrado vuestro apoyo a nuestra asociación de forma clara y decidida, comprometiendo vuestro tiempo, vuestra participación y vuestra aportación económica, algunas incluso más alla participando con sus empresas como patrocinadoras de este evento.... por todo ello tengo que daros las gracias.
Hace apenas un año, la Asociación no existia.
Me emociona particularmente la forma en que hemos recorrido el camino que nos ha traido hasta esta noche, el esfuerzo que ha convertido una idea en una realidad tangible e incuestionable.
Una realidad que se manifiesta, no solo en esta Cena, sino también en nuestros encuentros de networking presencial, en nuestro programa de televisión en 25 TV, en la creación y puesta en marcha de la primera plataforma de networking on-line y en las relaciones de colaboración que se establecen continuamente entre las socias del Círculo.
Sin embargo, la lectura honesta debe ser, por fuerza, doble.
Por un lado es cierto que el camino recorrido es enorme, sobre todo teniendo en cuenta el escaso tiempo transcurrido..... pero también es verdad que nuestra actitud solo puede ser modesta, como modesto es este acto y
modesta es también (aún) nuestra asociación.
Una vez transcurrido este primer año de vida que, con toda lógica, se ha dedicado a dar vida a la asociación, asentarla y convertirla en una realidad sólida y difícilmente cuestionable...... llega el momento de plantearse preguntas que no por tópicas, dejan de ser necesarias y trascendentes:
¿Quienes somos? ¿a dónde vamos?
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La pregunta no es literal ni tampoco tiene una lectura religiosa....
Expresándolo en términos de mercado, licencia que me voy a permitir, dado que somos profesionales y ese es la naturaleza última de la asociación, diria que el hecho de que contemos con 1900 socias en el breve plazo de un año, aún incluyendo el matiz de que la pertenencia al círculo es nominalmente gratuita...demuestra claramente la existencia de una demanda, de una necesidad por parte del colectivo que pretendemos aglutinar...
El elemento identificador de nuestra asociación se basa en una definición establecida en términos de actividad/perfil profesional y de género.
En primer lugar,el hecho de que exista una necesidad de asociarse en estos términos, necesidad por otro lado muy difícil de imaginar en un colectivo masculino, define de forma implícita la voluntad por un lado de compartir, colaborar e intercambiar en un entorno afín, ayudándonos entre nosotras y ayudando a otras mujeres que emprenden este camino
En segundo lugar, también se evidencia la necesidad consciente o inconsciente de revindicar, defender, divulgar y promover la figura de la mujer de negocios, con la consiguiente lectura de que consideramos que esta figura no está debidamente reconocida, aceptada y valorada.
Estas dos premisas, se constituyen por tanto en los ejes principales de nuestra identidad como asociación, tanto pensando en el colectivo como en las mujeres que lo componen, y por ello estos dos frentes serán objeto principal de nuestras actividades futuras.
Esta reivindicación genera, en la práctica, hostilidad y desconfianza en muchos interlocutores de diferente nivel tanto en el ámbito empresarial, social, económico, laboral o institucional.
Se trata, en esos casos, de lo que se percibe por algunos como una muy negativa combinación de términos al unir “mujeres” con “directivas, empresarias, emprendedoras o profesionales”.
Deseamos mejorar las condiciones en que realizan su actividad las mujeres con una perfil profesional de responsabilidad, ya sea como empresarias, directivas, emprendedoras o profesionales.
En nuestro caso no es una simple preocupación filantrópica o ideológica.
Todas nosotras dependemos de nuestra actividad profesional para nuestro bienestar económico, el de nuestras familias y nuestra justa realización como seres humanos en la parte que corresponde a nuestra carrera profesional y reconocimiento.
En fin que somos mujeres de negocios, queremos un trozo del pastel y lo queremos porque es nuestro.
Puede razonarse que los objetivos expuestos resultan demasiado ambiciosos para nuestra modesta situación actual. Pero aún siendo esto cierto, no puede olvidarse que contamos también con recursos muy valiosos.
Además del entusiasmo, voluntad, implicación y complicidad de todas las que estamos aquí, compartiendo esta noche, tengo que agradecer a las instituciones que manifiestan su apoyo con su asistencia y , mucho mas allá, participando como patrocinadores del evento. Agradecemos sinceramente su apoyo expresado en términos tan claros.
